A LOS CUATRO AÑOS DE TU PARTIDA: HOMENAJE PÓSTUMO A DON ÍTALO REYES ESCÁRATE, INCANSABLE LECTOR DE DIARIOS.

Mi padre, hace 9 años, aproximadamente, en la celebración de los 5 años de su nieta Mabel, mi hija.

Nació un 17 de mayo de 1927. Sólo llegó a estudiar hasta el segundo grado de primaria en el colegio "Ignacio Sánchez", ex 21. Dedicó casi toda su vida al oficio de pintor de automóviles, artefactos y muebles; sin embargo eso no fue obstáculo para que desarrolle el hábito lector. Desde muy joven se sintió atraído por el poder envolvente de las letras y de la información. Leía, desde que tengo recuerdo, el diario "El Tiempo". También cuando podía, las revistas de "El Comercio" y "La República". Las noticias fueron una de sus pasiones. La otra fue el trabajo. Ni el domingo "paraba la máquina", aunque sí salía más temprano de laborar.

Recordaba haber tenido hace muchos años a gente muy importante y millonaria entre sus clientes. Su adicción al trabajo se explica porque desde la niñez debió trabajar para ayudar a su madre en la manutención de sus hermanas. Nunca dejó sola a su progenitora, hasta su muerte la acompañó. 

Algo que me enseñó en mi niñez y que hasta ahora recuerdo y practico es el baño diario, casi de madrugada, antes de empezar la jornada. Él ejecutaba tal saludable acción, hiciera calor o frío. Con su peculiar y jocoso estilo me decía: "Bota primero al diablo (ya saben a qué se refería) y luego te bañas".

El hombre, de quien escribo estas palabras mal hilvanadas, fue mi padre. El martes 26 de noviembre, antes de las diez de la noche dejó de respirar. Parece que esperó a que llegara yo nada más para partir. Espero que alcances la gloria eterna, papá. 

Sus sobrinas pidieron llevarlo en hombros a su tumba, en el cementerio "San Miguel Arcángel" (ex Metropolitano). Mi hermano mayor Jorge preside el cortejo fúnebre.