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María Cristina Arévalo Flores, profesora de la Institución Educativa N° 14 121 del distrito de La Arena, Bajo Piura, desapareció desde el 10 de noviembre y hasta el momento sus angustiados familiares continúan buscándola.
Ayer 20 de diciembre nos encontramos, en la calle Chepa Santos de La Unión, con su hermana Auspicia, quien continuaba pegando afiches con el rostro de María Cristina en dicha arteria. Nos contó que hace cinco días una compañera de trabajo de su hermana recibió una llamada del celular de María Cristina, en la que le dijeron que a su mamá (pues pensaron que era una de sus hijas) la tenía secuestrada un narcotraficante. Esta extraña llamada hace abrigar a sus familiares la esperanza de encontrarla con vida.
La desaparición de la docente ha levantado diversas especulaciones de la gente y esta llamada, sin duda, avivará las conjeturas.
Según se nos informa, la docente el miércoles 09 de noviembre pidió permiso a su director por encontrarse mal de salud por lo que no llegó a laborar; al día siguiente llamó por teléfono a una colega para que se haga cargo de sus alumnos pues iba a llegar tarde. Ese mismo jueves fue vista por última vez por una amiga, en horas de la mañana, frente al Municipio del distrito de La Unión, acompañada de un agricultor natural de San Clemente, Bellavista, llamado Lázaro Bayona Paiva, quien debía devolverle 9 600 Soles, producto de un préstamo que le había hecho. Precisamente este personaje ya ha sido interrogado por la Policía pues sobre él recae sospecha. En su manifestación ha afirmado que sí devolvió el dinero a la profesora y que desconoce su paradero.
María Cristina Arévalo Flores ocupaba parte de su tiempo a prestar dinero a colegas en la Derrama Magisterial, lo que también hace presumir que haya sido asaltada y secuestrada para robarle su capital.
Mientras tanto, familiares y amigos han organizado movilizaciones para pedir que las autoridades, sobre todo las policiales, se preocupen por encontrarla. La compañía de teléfonos ya ha reportado parte de las llamadas que estableció María Cristina desde su celular antes de que desapareciera, pero la información la está enviando poco a poco, según lo manifiesta su hermana Auspicia.
Lo que hace mientras tanto su familia es continuar buscándola por su propia cuenta. Ya han recorrido todos los lugares, desde Sechura hasta las carreteras a Chiclayo y a Paita, con resultados negativos. La oración tampoco está ausente, todos los jueves con apoyo de un grupo religioso de Piura los familiares elevan sus plegarias al Divino Hacedor para encontrar a María Cristina.
Finalmente, Auspicia Arévalo manifiesta que se ha levantado la versión de que su hermana ya habría sido encontrada en Ecuador, lo que es absolutamente falso, por lo que no cesan en su búsqueda.
La DIVINCRI policial también viene haciendo lo suyo.
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